Si Hablamos de Ricardo Maldonado Morales y Roberto Cruz, es muy probable que para muchos aficionados a la música Latina en el mundo entero no signifique mucho, pero para todos los amantes y seguidores de la máxima expresión del barrio Latino, hablar de Richie Ray y Bobby Cruz tiene un significado gigantesco: se trata de una dupla de genios de la música que ha hecho historia en el mundo de la Salsa, su aporte a la música Afro-Antillana en los últimos cuarenta años es enorme. Su cadencia, su ritmo, su melodía y sus mensajes se han quedado en el corazón de todos nosotros.
Para nadie es un secreto que el piano de Richie y la voz de Bobby llegaron para quedarse en el ámbito de la música de Salsa en todos los rincones donde se les ha escuchado.
Richie Ray es pianista, compositor y arreglista; Bobby Cruz es el cantante y también arreglista y compositor. Ambos se desempeñan como pastores cristianos y han compartido la parte artística y musical con la devoción religiosa gran parte de sus vidas, desde mediados de los sesentas, cuando eran un par de jóvenes y prometedores músicos y tuvieron la oportunidad de conocerse para crear un sonido único e incomparable.
Era la época del Boogaloo, el Shingaling y la Pachanga, y el Rock and Roll, un ritmo culturalmente diferente a los antillanos, estaba de moda. Sin embargo, la la cultura de la música Latina es única, y los artistas que homenajeamos en esta edición del Salsero del Mes se dedicaron desde entonces a ampliar nuestro legado musical contribuyendo en los más variados ritmos, pues se dedicaron a cultivar el Chachachá, la Guajira, el Bolero, el Mambo y el Jazz, demostrando su enorme talento y su notable versatilidad. Durante todos estos años de producción han creado obras musicales de antología.
.A diferencia de muchos de los grandes de nuestra música, que no pudieron evadir la disipación que suele ser el común denominador de algunas etapas de la vida artística, cuando se junta el reconocimiento de los fanáticos con la casi irresistible tentación de los excesos del placer (drogas, alcohol, profusa promiscuidad), con todo lo que ella conlleva, como la pérdida de constancia en la producción musical, el aislamiento, las dificultades de rehabilitación y la muerte, Richie y Bobby contaron con la fortuna de ser unos privilegiados y recibir el favor del Todopoderoso para continuar y perpetuar su obra.
Si bien la música de los “Durísimos”, como se les suele llamar, ha cambiado un poco respecto de las grabaciones de sus primeros diez años, lo que es inevitable en una obra artística tan extensa, y ahora se encuentra más encaminada a su nueva obra misionera, es bien sabido que su sabor y alegría no han cambiado, y en su disco número 102 (¡102 producciones no pueden ser una mera casualidad!) aparecen temas de la Salsa dura que ha sido la constante desde sus inicios.
Desde sus primeros años de grabaciones Ricardo y Roberto nos han deleitado con temas como: “El Mulato”, “Si te contara”, “Comejen”, “Mambo en Paris”, “Guaguanco in Jazz”, “Descargas I y II”, “Richie’s Jala Jala”, “Bomba Camara” y “Pancho Cristal” entre muchísimos otros de su enorme, variado y atractivo repertorio.
Que este sea este el momento que nos dé la oportunidad para rendir un merecido homenaje desde nuestras instalaciones y desde nuestro sitio en Internet www.larinastereo.com a Richie Ray y Bobby Cruz, quienes nos visitaron el 16 de diciembre de 2.005 y que con todo su talento han realizado un lindo aporte a nuestra música a lo largo de todos estos cuarenta años. Es indudable que se constituyeron en pilares fundamentales de Nuestra Música, y su legado hace parte de la cultura popular de Latinoamérica y el mundo.
Para nosotros en Latina Stereo es motivo de orgullo poder contar en Medellín y en Colombia con personajes que son excelentes como músicos son excelentes y excepcionales como personas.
Y, avalando su grito salsero, vale terminar esta entrega diciendo: ¡Cristo nos ama, Aleluya!
¡Que viva la música!
¡Que viva la Salsa!
¡Que vivan Richie Ray y Bobby Cruz!
Por Sergio Rendón Ángel
Para Latina Stereo 100.9 FM, 100% SALSA en Medellín y el Mundo
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